"Reconocieron el trabajo por la paz"

Por Javier Borelli / desde Nueva York
El canciller Héctor Timerman se levanta del asiento y alza el brazo derecho. Los dedos índice y medio de su mano derecha hacen la "v" mientras los aplausos brotan de todas las bancadas. El presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el serbio Vuk Jeremic, acaba de anunciar que la Argentina es el país que obtuvo la mayor cantidad de votos para integrar el Consejo de Seguridad, y a partir del próximo año tendrá un lugar en la mesa donde se toman las decisiones más sensibles de la ONU. "Es un gran resultado y nos llena de orgullo", le cuenta el canciller a Tiempo Argentino minutos después de la elección. "Primero porque es un reconocimiento a la región y a la unidad latinoamericana. Luego, también es un reconocimiento al trabajo que ha venido desarrollando la Argentina en todos los organismos multilaterales. Y finalmente, también es una respuesta a algunos sectores del establishment argentino que insisten en que la Argentina está aislada. Esta es la mejor demostración del reconocimiento que tiene la Argentina en el mundo", concluye Timerman.
El canciller viajó especialmente para estar presente en la votación que significó la culminación de un largo trabajo del servicio exterior nacional. Un final feliz que ya podía preverse desde abril, cuando los países miembro del Grupo de Estados de América Latina y del Caribe (GRULAC) aprobaron por unanimidad la postulación de Argentina. Como único candidato de la región, el asiento estaba prácticamente garantizado, pero considerando que hacen falta dos tercios de los votos para ingresar al Consejo de Seguridad y que el GRULAC está integrado sólo por 33 miembros, cualquier cosa podía pasar. "Ciento ochenta y dos países de los 193 que estaban habilitados para votar lo hicieron a favor de la Argentina. Podrían haber votado en contra, podrían haberse abstenido y, sin embargo, votaron a favor. Creo que han reconocido el trabajo que hemos hecho en el campo de la paz, de la solución pacífica de las controversias, en el campo del desarrollo económico y de la defensa de los países en desarrollo", explicó el canciller. Pero esta alegría, continuó, debía ser compartida con la región porque "la Argentina no siente que la banca sea suya. Nosotros creemos, y se lo dijimos así a los países del Caribe y de América Latina, que esta banca pertenece a la región y la región va a tener en la Argentina un cabal representante de sus intereses".

–¿Qué rol puede esperarse de la Argentina en el Consejo de Seguridad entre 2013 y 2014?
–Nosotros siempre estamos por los mismos objetivos. Resolución pacífica de los conflictos, no intervención extranjera en los asuntos internos de los países, desarme nuclear e independencia de los países para elegir su destino. Y por último, porque creo que es importante, todavía no está terminado el tema de la descolonización y, por lo tanto, lograr el fin del colonialismo también va a estar presente porque es una manera de ratificar que las Naciones Unidas es el ámbito donde todos los países tenemos que sentirnos en igualdad de condiciones. Creemos que la existencia del colonialismo va en contra del principio básico de las Naciones Unidas.
–¿En ese marco la Argentina va a hacer presente su reclamo por Malvinas?
–Vamos a plantear la obligatoriedad de los países miembro de cumplir con las resoluciones de las Naciones Unidas. Lo mejor que puede hacer la Argentina durante su permanencia en el Consejo de Seguridad es resaltar la importancia que tiene la ONU en un mundo en paz. Justamente el Consejo de Seguridad no se tiene que ocupar sólo de temas militares, sino que la seguridad también es que todos coman, que todos tengan un trabajo digno, que tengan el derecho y la posibilidad de desarrollarse. Esos temas también hacen a la seguridad del mundo y no se garantizan con ejércitos, sino con igualdad de oportunidades.
–Otro tema en el que Argentina ha venido insistiendo en los últimos años es en la necesidad de una reforma en el Consejo de Seguridad. ¿También puede esperarse un planteo en ese sentido?
–La Argentina viene trabajando hace muchos años en el grupo Unidos por el Consenso, donde tenemos una intensa actividad. Es un grupo de muchos países en el que tratamos de democratizar el Consejo de Seguridad teniendo en cuenta que la Asamblea General de las Naciones Unidas creó el Consejo y que no fue al revés. Por lo tanto, el órgano rector de la ONU tiene que ser la Asamblea donde estamos representados todos los países. También creemos que el poder de veto (NdR: que tienen los cinco miembros permanentes del Consejo) es una situación anacrónica que representa a un mundo después de la Segunda Guerra Mundial. Ahora, el Consejo tiene que ser el reflejo del nuevo mundo. «

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