Walmart enfrentará huelgas en el día más rentable del año

Por Javier Borelli / desde Washington
La portada de la página web de Walmart de ayer daba la bienvenida a los visitantes digitales con un cartel colorido que decía "el viernes negro empieza hoy". Un circulo amarillo sobreimpreso anunciaba que las tiendas abrirían a las ocho de la noche, cuatro horas antes de que el "día de acción de gracias" ceda lugar al "viernes negro", la fecha elegida por las grandes tiendas para dar inicio a la temporada de compras prenavideñas con importantes descuentos. El "Viernes Negro" recibe ese nombre porque es el día del año en que los comercios abandonan los números rojos y empiezan a anotar en tinta negra sus ingresos gracias al impulso que toman las ventas.

El hipermercado más grande de Estados Unidos pensó que anticipándose al calendario podía sumar un mayor número de clientes, pero no evaluó la reacción que iba a generar entre sus pauperizados empleados. El anuncio de una huelga en 1000 tiendas de todo el país ocupó espacios en la prensa nacional y obligó a los responsables de comunicación de la empresa que en 2011 ganó 16.390 millones de dólares y quedó primera en el ránking que hace la revista Fortune entre las más grandes de los EE UU a dejar de pensar en los festejos por los 50 años del hipermercado para dar la cara en los noticieros televisivos tratando de responder a las acusaciones por explotación laboral y persecución sindical.
El sueldo promedio anual de un contratado de Walmart ronda los 15.500 dólares, lo que equivale a menos de 9 dólares por hora y a menos del 70% del ingreso necesario para cubrir la canasta básica anual para una familia tipo (dos adultos y dos menores de edad), según denuncia el sitio web "Produciendo un cambio en Walmart", realizado por empleados del hipermercado, miembros del sindicato de trabajadores gastronómicos y comerciales, líderes religiosos y otros grupos de la sociedad civil. La empresa se defiende argumentando que sus empleados a tiempo completo ganan en promedio casi 13 dólares la hora, lo que los pone entre los trabajadores mejores pagos en el rubro (aunque apenas arriba del límite de la canasta básica). Claro que por "política de la compañía" no informan el porcentaje de empleados full-time que tienen en su nómina.
David Tovar, vicepresidente del área de Comunicación Corporativa, apenas se atrevió a decir que las cosas no eran como las denunciaban los empleados durante una entrevista con CNN el martes. Frente a la consulta por la negativa al diálogo con los sindicatos, Tovar respondió que los empleados sindicalizados eran pocos y los esfuerzos de la empresa en esos momentos estaban puestos en preparar "un gran viernes negro". Dan Hindman, un empleado part-time de Walmart de Los Ángeles, atestiguó el motivo de la baja participación sindical desde la pantalla de la cadena CBS: su horario de trabajo fue reducido a 15 horas desde que se unió a un grupo de trabajadores que quieren la sindicalización. Por eso aseguró que aunque su horario marca que debería trabajar el "viernes negro", él no se va a presentar.
El movimiento Occupy que se hizo conocido hace más de un año al iniciar una protesta en Wall Street denunciando las desigualdades del sistema, anunció que apoyará la huelga de los trabajadores de Walmart. De esa unión virtuosa salió precisamente Occupy Black Friday, una acción conjunta con organizaciones que se manifiestan contra el consumismo y la explotación laboral que tendrá lugar hoy frente a un hipermercado de Walmart en Nueva Jersey.

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