“Monti puede hacerle peor a Italia”

Por Javier Borelli
Vicepresidente del Consejo Regional de Umbría, en el corazón de la península, Orfeo Goracci cuestiona al sucesor tecnócrata de Silvio Berlusconi y teme que la centroderecha retome el gobierno en 2013. En diálogo con Tiempo Argentino, este político del Partido Refundación Comunista quiere un frente para que la izquierda llegue al poder.

"Mi temor es que la cura económica que propuso Mario Monti le haga peor a la economía italiana”, confiesa Orfeo Goracci, vicepresidente del Consejo de la región de Umbría, la única sin salida al mar de la península itálica y uno de los bastiones históricos de la izquierda en ese país. “Italia es un país rico donde el 10% tiene el 60% de la riqueza. Entonces tiene que haber un gobierno social democrático serio que parta de la idea de justicia para que los que ganen más paguen más. Esto no lo hizo Monti y no lo podrá hacer porque el parlamento, que es quien lo sostiene, es el mismo que estaba con Berlusconi”, aclara Goracci que visitó Argentina para participar del “Encuentro continental de jóvenes umbros en América Latina”, una actividad a la que asistieron migrantes italianos radicados en Brasil, Venezuela, Colombia y nuestro país.

- A poco de asumir Monti como presidente del Consejo de Ministros presentó un programa para salir de la crisis que implica ajustes y políticas de flexibilización laboral. ¿Cómo afecta a su región?
–Yo represento a Umbría, una región de 900 mil habitantes sin mucha industria. Entonces, si se ataca al empleo público vamos a ser una de las regiones más resentidas porque su estructura económica se basa en la sanidad, la justicia, la educación y la administración pública. Hoy tenemos escuela y salud casi exclusivamente pública, pero si ahora hay que empezar a pagar por algunos servicios va a pasar que los que puedan van a elegir el sistema privado y el resto va a salir perdiendo.
-Se presenta a Monti como un tecnócrata tratando de esconder que detrás de las medidas técnicas hay una ideología. ¿Cuál es su opinión de esto como hombre de izquierda?
–Creo que este gobierno sigue principalmente las líneas de la banca central europea y eso me preocupa porque desde que el mundo es mundo, la banca no tiene como primer objetivo el bienestar de la gente. Además, en este caso, el pueblo no ha elegido al gobierno y el riesgo para la política, y en particular para la izquierda de mi país, es que al final pueda volver el berlusconismo, que es como defino a la forma de entender la política de Berlusconi: demagógica, populista, basada en la imagen televisiva.
–¿Por qué la izquierda no puede ser una alternativa al gobierno?
–La centroizquierda italiana no tiene un gran líder y en la sociedad moderna si no sos un buen comunicador, no vas a ninguna parte. De todas formas yo creo que una izquierda seria puede llegar al poder en una alianza. Desde allí puede contribuir a un gobierno que defienda el suelo, la justicia social y la distribución de la riqueza. Eso, sin ser un plan quinquenal de la Unión Soviética, puede ser una política progresista con suceso económico.  <
Los ojos sobre la Argentina
Orfeo Goracci accedió al Consejo Regional de Umbria integrando la Federazione della Sinistra, un frente electoral de varios partidos de centroizquierda entre los que se encuentra el Partito della Rifondazione Comunista que él integra. Desde su plataforma se señalaba su coincidencia con el “Socialismo del Siglo XXI”, aunque su interpretación no parece igual a la promovida por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. “Me siento más cómodo con políticas reformistas como las de Lula en Brasil, aun con sus contradicciones, y con elementos de progresismo como los que aquí encuentro con Cristina Fernández de Kirchner”, explica. Aunque aclara que respeta al gobierno venezolano y destaca la “autonomía e independencia” de su país “en un planeta donde los EE UU decidían a quién premiar y a quién castigar”. De su visita también se lleva nuevas impresiones. “Vi un país dinámico, con restaurantes llenos y un parque automovilístico tranquilamente europeo. Se ve que el crecimiento económico tuvo una correspondencia real en la cotidianidad de la ciudadanía”, analiza. Impresiones que revalorizan su presencia: “los países sudamericanos están en crecimiento mientras que Italia está en una etapa de estancamiento. Entonces promover relaciones culturales puede generar un intercambio económico que ayude al crecimiento mutuo.”
Publicado en Tiempo Argentino el 12/12/2011

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